Buenos días a todas las compañeras y compañeros presentes. Hoy damos inicio a nuestra primera asamblea nacional del presente año y lo hacemos, una vez más, convencidos del trabajo que hemos trazado como organización para velar por los derechos de las y los profesionales y por la defensa de una salud pública. Una lucha que consagre la salud como un derecho social fundamental, de calidad, universal y gratuito.
Nuestra organización avanza sólida a su primer cuarto de siglo de vida, un recorrido que ha sido pavimentado por muchas y muchos que han apostado por un sindicalismo autónomo, transparente y con convicciones respecto a las reivindicaciones laborales que requieren las y los profesionales y la salud pública. Por un sindicalismo que renueve los cimientos de quienes entendieron, en los albores del siglo XX, que este era el camino para lograr la construcción de una sociedad más equitativa, respetuosa y tolerante con todas y todos sus integrantes.
Nuestra organización, que hoy se ha convertido en la Confederación Fenpruss, nació en 1995 con el sueño y anhelo de avanzar en mejorar las condiciones laborales de quienes representamos. 23 años después, podemos decir que el trabajo se ha hecho bien, los logros de nuestra organización están a la vista y por eso debemos agradecer la tenacidad, compromiso y responsabilidad de quienes iniciaron este camino que actualmente es aportado por quienes hoy somos el presente y, por cierto, continuará siendo construido por quienes deben tomar la posta del trabajo realizado en estos casi 25 años. Nos quedan desafíos y muchos avances que conquistar para el bienestar de nuestras asociadas y asociados, que han confiado en esta organización y han puesto en nuestras manos la edificación de mejores condiciones laborales que esperamos, más temprano que tarde, poder coronarlo con un nuevo modelo de carrera para todas y todos los profesionales.
A la par de esta incansable lucha por un trabajo con derechos y que reconozca el compromiso de cada una y uno de las y los profesionales, estas mismas mujeres y hombres dirigentes soñaron en los primeros años de vida de nuestra Fenpruss que sólo una salud pública fortalecida puede otorgar una mejor calidad de vida para todas y todos los chilenos. Por eso, mantenemos firme nuestro compromiso por luchar por una salud pública gratuita, universal y solidaria, que reconozca en el Estado su garante indiscutible y que sea este mismo quien avance en poner a la salud como pilar fundamental de un sistema de seguridad social, con reconocimiento constitucional como un derecho fundamental para todas y todos los chilenos. Solo así podremos avanzar hacia un país que reconozca en cada una y uno de nosotros, personas dignas de una vida colectiva sin distinciones según nuestra posición social, económica ni cultural, y que permita superar las determinantes sociales que comprometen el desarrollo futuro de nuestras vidas. Porque aquí estamos defendiendo la salud pública de Chile, y lo volvemos a decir una y otra vez: queremos más Estado y menos privados para resolver los problemas de salud del país. Es hora de decir con fuerza que ya es tiempo de acabar con el falso paradigma de que lo privado resuelve lo público, Chile está en condiciones políticas de dar el salto cualitativo que merecemos que ponga el bienestar del conjunto de la sociedad como eje central de su desarrollo en salud. En eso estuvo y en eso está y estará nuestra Fenpruss.
Así también, la historia de nuestra organización está cruzada por la búsqueda de un sindicalismo que se disponga para luchar en contra de la avanzada, cada vez más fuerte, de una construcción de sociedad individualista, neoliberal e intolerante con los derechos sociales, las políticas públicas y que destruye los cimientos colectivos y democráticos que se edificaron a partir de diversos cambios políticos, económicos, sociales y culturales durante el siglo XX. Nuestras sociedades democráticas están en juego y el sindicalismo debe tener un rol preponderante, por eso aplaudimos a quienes enarbolaron las primeras luchas políticas desde nuestra organización y que hoy se profundizan no solo en el ámbito de salud, sino que también en la búsqueda de un sistema de pensiones basado en la solidaridad, un sistema político que recupere su condición democrática con una nueva constitución, que busque la eliminación del trabajo precario que no reconoce derechos laborales en muchas y muchos chilenos. Porque hemos estado en estas y otras luchas, nuestra Fenpruss se sigue preparando para dar frente a esta oleada de políticas neoliberales y antidemocráticas que pretenden jibarizar el rol del Estado, por la construcción colectiva y el respeto a todas y todos sin distingos sociales, étnicos, culturales y de género. Porque queremos seguir en esa senda, la Fenprus continuará su rol político sindical para posicionarnos como una organización capaz de incidir en el debate público para propiciar una sociedad más tolerante y equitativa.
Cuando estamos cerca de cumplir nuestro primer cuarto de siglo, podemos decir con satisfacción que hemos hecho bien la tarea y nos hemos convertido en un actor reconocido. Pero este transitar ha estado lleno de logros y también de dificultades y errores que se han asumido con responsabilidad y nunca desviándonos de nuestros objetivos organizacionales. De eso se trata, de avanzar aprendiendo, construyendo y reconstruyendo, de mirar y mirarnos para mejorar, para avanzar y para seguir soñando con un mejor país, con una mejor salud y con una mejor sociedad. Un abrazo a todas y todos y a mantener el espíritu fenprussiano por estos primeros 25 años y por muchos años más. Muchas Gracias.